La alcaldesa de Roma declara la guerra al juego y solo permite un máximo de 8 horas de funcionamiento para las máquinas
La modalidad más jugada por los usuarios problemáticos es la apuesta deportiva, algo que hace más incomprensible la medida adoptada por la alcaldesa.
La alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, ha declarado la guerra a las máquinas de azar. Firmó una ordenanza para permitir su funcionamiento un máximo de 8 horas por día. Aquel local que incumpla el horario será sancionado con 450 euros.
La hora de encendido es de 9 a 12 y de 18 a 23. En el caso de incumplimiento recurrente la comercialización del producto quedará suspendida por espacio de 5 días. "La salud de los ciudadanos es lo primero y nuestra guerra contra el juego no se detiene. En Roma tenemos 50.000 máquinas, más del 12% de las instaladas en todo el país", destaca la alcaldesa Raggi.
Contra esta medida arremete Giacomo Perroni, presidente de la delegación Sapar, ante medidas "ilógicas, injustificadas, desproporcionadas y sustentadas en un desconocimiento total del tema". Según Perrone entre los jóvenes jugadores problemáticos las apuestas deportivas es la modalidad más jugada (78,3%). También en la edad adulta. Por tanto no entiende ese ataque "feroz" al sector de máquinas de azar. "Somos un sector que genera empleo y garantiza la legalidad de la actividad. Lo que está pasando, ¿es solo desinformación y demagogia o hay algo más?", advierte Perroni.
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