La prohibición de las apuestas en vivo, las restricciones en depósitos y una oferta de casino reducida hacen peligrar el futuro del juego en línea en Alemania

ANÁLISIS EFECTUADO POR MAARTEN HAIJER, SECRETARIO GENERAL DE EGBA.

A medida que continúan las discusiones sobre las reformas de juego en línea de Alemania, la Asociación Europea de Juegos y Apuestas (EGBA) insta a los responsables políticos de Alemania a simplificar el complicado marco político del país para los juegos de azar en línea. Alemania es uno de los pocos países europeos restantes que todavía no tiene un mercado de juego en línea que funcione correctamente, y el nuevo Tratado de Estado debe solucionarlo.

Es por eso que EGBA respalda plenamente los esfuerzos del gobierno para establecer una nueva política de juegos de azar y “agradecemos el progreso hacia el desarrollo de una regulación de juegos de apuestas en línea funcional y efectiva”. Sin embargo, con menos del 50% de la actividad de juego en línea del país actualmente en sitios web offshore, la nueva regulación no será una tarea fácil.

La posición inicial de Alemania es tan mala que, en 2017, el Instituto de Economía de la Competencia de Düsseldorf (DICE) predijo que el país tenía una tasa de "canalización" de solo el 1,8% (por ejemplo, el 1,8% de la actividad de juegos de azar en línea en Alemania tuvo lugar en sitios web que tienen licencia en Alemania), en comparación con el 95% en el Reino Unido y el 90% en Dinamarca.

Al menos esto deja en claro la prioridad de la nueva política: la canalización. La nueva política solo puede ser efectiva si garantiza que los sitios web de juegos de apuestas con licencia en Alemania sean más atractivos que los que están fuera de ella, por lo que los clientes jugarán en estos sitios web en lugar de los que no tienen licencia. Esto requiere que la nueva política satisfaga las necesidades del cliente al garantizar que haya suficientes opciones en el mercado, incluidas marcas, productos y ofertas de apuestas.

Es por eso que las medidas de política actualmente sobre la mesa son altamente cuestionables. Son demasiado prescriptivos e introducen restricciones que no están basadas en evidencia. Los efectos combinados de las restricciones propuestas en las cuentas de los jugadores (por ejemplo, restricciones de depósito y tiempo), en productos (por ejemplo, la prohibición del casino en línea no se levanta por completo) y en los tipos de apuesta (por ejemplo, se prohibirán las apuestas en vivo), pone en peligro la tarea de lograr un alto índice de canalización y prepara el escenario para continuos desafíos políticos y legales.

La mayor amenaza para el éxito de la nueva política sigue siendo el enfoque gradual hacia la regulación del casino en línea. La decisión de dejar esto al Lander no solo creará mercados de mini-casino, con diversos grados de canalización, sino que también conducirá a regulaciones de juego que son inconsistentes. Esta también fue la opinión de la Comisión Europea, quien previamente cuestionó si los efectos acumulativos de los límites y restricciones al programa de apuestas de Alemania permitirían una gama de productos suficientemente atractiva para lograr una alta tasa de canalización.

“Hemos tenido una regulación adecuada del juego en línea en Europa durante más de 10 años y es hora de que Alemania también tenga su casa en orden. Es de interés para todos introducir una ley que garantice altas tasas de canalización, estabilidad regulatoria a largo plazo y un mercado en pleno funcionamiento. Esto requiere 3 ingredientes esenciales”, señala Maarten Haijer, secretario general de EGBA.

En primer lugar, el consumidor debe tener opciones, y debe tener valor. Estos son, en última instancia, los impulsores esenciales de cualquier mercado. El juego es un comportamiento humano y los jugadores "compararán" sus marcas, productos favoritos o las cuotas o bonos de apuestas más competitivos. Más aún en un entorno en línea, donde las opciones están disponibles libremente, independientemente de si el sitio web es parte de un mercado regulado o no. La instalación de muros artificiales o regulaciones "de arriba hacia abajo" no funciona, las políticas más efectivas son aquellas que se derivan de lo que el consumidor quiere.

En segundo lugar, el gobierno debería crear un marco regulatorio adecuado para el mercado de juego en línea del país. Este no es el caso actualmente. Solo dentro de un marco regulatorio funcional puede el legislador establecer un alto nivel de protección del consumidor. Parte de este marco también debe ser un procedimiento de licencia que sea claro, transparente y predecible, para que las empresas que quieran obtener una licencia, o que hayan obtenido una licencia, sepan lo que deben cumplir y puedan construir una relación sostenible con sus clientes.

En tercer lugar, las empresas deben poder obtener ganancias para poder permanecer en el mercado. Los dos puntos anteriores se basan en esto. Si las cargas impositivas y regulatorias son demasiado altas, las compañías no ingresarán o permanecerán en el mercado, particularmente cuando ya existen otras restricciones que reducirán sus ingresos. Más empresas en el mercado significan más opciones para el consumidor y más ingresos fiscales para el estado. El sistema de licencias debe ser simple y consistente, pero la propuesta de permitir la exclusión voluntaria de Lander para la licencia de casinos en línea pone esto en peligro.